Actividades al aire libre

Además del senderismo y otras rutas turísticas, es un lujo para el visitante poder realizar deportes y actividades disfrutando del aire sano y limpio de nuestros espacios naturales.

CICLOTURISMO

Nuestras carreteras comarcales, sobre todo los trayectos Almazán-Cubo de La
Solana-Almarail-Alparrache-Almazán y, una vez hecha la autopista, el de Lubia-Tardajos- Cubo de La Solana-Almazán-Lubia, son un atractivo especial para los ciclistas por no ser recorrido habitual de los vehículos a motor.
Por su parte, los muchos caminos y sendas de nuestros montes constituyen indicadas rutas para realizar marchas de bicicleta de montaña.

CAZA

En los montes del Municipio, se encuentran especies de caza mayor como el ciervo, el corzo, el jabalí… y de caza menor como la liebre, conejo, la codorniz, la perdiz, la paloma, la becada, tórtola, malviz… En menor número, las acuáticas en ríos y lagunas, el azulón, ánade real, fochas…
En Cubo de La Solana, se creó en 1975 el coto “Virgen de La Solana” con 500 Has. del Ayuntamiento y fincas privadas, que lo disfrutan 28 socios, cazadores locales y vinculados, y el coto “El Portillo” en la zona del monte de propiedad particular con otras 500 Has. En Lubia existen tres cotos, dos en Rabanera, uno en Ituero y otro en Almarail. Se realizan monterías, con sus rehalas y escenas típicas, que constituyen un atractivo turístico y fuente de ingresos.

RECOGIDA DE SETAS

En nuestros montes y dehesas proliferan las setas que conocen bien los especialistas y para los no muy entendidos están los conocidos níscalos, champiñones, las apreciadas setas de cardo, las lepiotas…

PESCA

El “Padre Duero”, con sus meandros, y el río Mazos bordean el término de Cubo de La Solana y recorren nuestro Municipio. Su caudal ecológico, regulado por el pantano de Los Rábanos, preserva la vegetación y protege la pesca de las especies autóctonas principalmente el cangrejo, barbos, carpas, truchas, bogas…

OBSERVACIÓN DE LAS ESTRELLAS, FLORA, FAUNA, HUELLAS…

El espacio natural del Municipio es para mayores y niños, especialmente de la ciudad,  una viva escuela de la naturaleza con clases prácticas para su conocimiento y disfrute.
El cielo de Castilla, particularmente en el medio rural, es limpio y transparente, sin contaminación lumínica, muy adecuado para la observación de las estrellas en noches claras.
La vegetación es muy variada. No sólo las grandes masas de pinos, carrascas, quejigos y robles, sino también arbustos como la estepa (jara), gamón, majuelo, zarzamora, endrino, gayuba… y plantas aromáticas como el tomillo, la ajedrea, cantueso, romero, lavanda, té de roca, manzanilla, menta poleo…
Flora silvestre. Tarea fácil es, sobre todo en primavera, hacer preciosos ramos con las numerosas flores del campo : Azulete (Ciano), Achicoria, Trompón (Narciso), amapolas, magarza… El campo parece un cuadro de Fra Angélico.
Fauna. Además de las especies cinegéticas ya citadas, por nuestros montes se hallan zorros, tejones… y, entre las aves, grajos, grajillas, abubillas, vencejos, golondrinas, labradoras, estorninos, tordos, pájaros carpinteros, gorriones, etc. y la amiga cigüeña, a la que se le han proporcionado postes para nidificar. Todo un libro de ornitología en vivo y en directo.
Huellas. Una afición interesante es tratar de rastrear por el monte las huellas de ciervos, jabalíes, zorros…

Llegados hasta aquí, os trasladamos la invitación que otro poeta hizo a Machado:

«Antonio, buen amigo, están en paz tus campos castellanos.
¡Si pudieras venir aquí, conmigo, a cosechar espigas, paisajes y veranos!»